los estudiantes cuenten con unas mejores condiciones de infraestructura en una sede propia.
Se le agradece a todos los que de una u otra manera han colaborado con esta magna obra como el Dr. David Barguil Assis y el señor Emiro Barguil Banda, pues el primero gestionó los recursos necesarios para la construcción de la Sede y el segundo donó la tierra que se necesitaba para construirla. Esta obra beneficiará no solo a los cereteanos, sino a personas de toda la región y por muchas generaciones, pues la Universidad de Cartagena llegó a Cereté para quedarse y aportar su granito de arena al desarrollo de la región. Solo Dios, quien todo lo puede, ha permitido que este gran proyecto se esté ejecutando en estos momentos.